El helado es una mezcla de distintos ingredientes (agua, leche y derivados azúcares, grasas vegetales, frutas y frutos secos, huevos y derivados, etc.) que suponen un aporte de proteínas, azúcares, grasas de origen lácteo o vegetal, vitaminas y sales minerales.
Sin embargo, y aunque la mayoría lo pase por alto, los helados son más que un capricho estival. Se trata de un alimento completo, que aporta numerosos nutrientes a nuestra dieta y cuyos beneficios deberían disfrutarse en todas las estaciones del año.