La elección de productos del mar reporta beneficios para la salud de los consumidores, ya que el pescado aporta proteínas de gran calidad. El pescado, en especial el azul, es una fuente de ácidos grasos poliinsaturados omega-3, contribuyen a mantener unos niveles normales de colesterol y juegan un importante papel en la prevención de la aparición de enfermedades cardiovasculares. El cuerpo humano no es capaz de producir estos ácidos, por lo que deben ser incorporados mediante la dieta.
Por su parte, los mariscos también cuentan con un gran valor nutricional. Son una fuente de proteínas, vitaminas y minerales, además de que son bajos en sodio y grasas saturadas.